La piel muere 365 noches,
la misma cantidad de veces
en que somos conquistados por la luz de día
365 amaneceres llenos de oportunidades
para levantarnos
para sacudirnos
para no disimular una sonrisa
para desechar los propios miedos y correr a toda prisa
365 tardes donde recostar el cerebro semidormido
morder tus orejitas pequeño cordero mío
y también rascarnos la espaldita… :)
365 madrugadas para, después de despertar asustada,
buscar tus deditos y dormir nuevamente,
remojar los ojos emocionada por tenerte…
365 nuevas expectativas, ideas, propósitos,
voluntades y nuevos sueños, aun cuando sean diferentes entre si,
ya que más da eso…
365 posibles caminos y la necesaria muerte en cada cruce
que sólo espera nuestros cuerpos desnudos
para adornarlos de nuevos vestidos
En definitiva, 365 oportunidades de muerte
y 365 ilusiones de nuevas y mejores vidas...