Reducto para los insomnes es esta noche fría e inerte
Por cada holograma suyo
e incorpóreo el pensamiento gigante de los ausentes
Porque amanece denso el manantial
que hasta el cuello humedece
y abofetea los senos a la escarcha cortante
Porque arrugadas las manos se bastan en rocas
y puntiagudas montañas de verde calor
manteniéndose cómodas en el Plexo Solar de los estados temerosos
donde tampoco hallo el sabor de mi ADN
ni un beso de cuatro letras...
Puse bandera donde duermen los instintos
un caníbal enamorado
un charco de orina roja
para que duerman también primitivas las intenciones
como la necesidad de nacer y morir en ambos brazos
o la espontánea ensoñación de la noche como víspera de Nueva Era
hermoseada con siglos de vástagos insomnes
donde pongo ojos y boca, piel y lengua
siembra de besos para este amor también de cuatro letras
de lánguidas manifestaciones
las que suelen llevarse en el pensamiento
y en otras cuatro letras que componen
lo que parece llamarse Alma...