Triste el día que viene bajando

Que triste el día que viene bajando
las nubes amenazan con llover en mi cabeza
y el hielo avanza insolente sobre este escritorio 
y mi taza de café
He sobrevivido a todo tipo de tempestades
tormentas y algunos cataclismos que, según dicen, 
el universo envía para hacerte mejor persona
pero, ¿cuanto más debe sucederme para aprender?...
A veces miro el reloj y otras tantas el calendario 
y vuelve esa ansiedad por recordar el tiempo vivido 
y ver al mismo instante que todo se nos está arrugando,
como el papel con borrones antes de tirar al cesto de la basura,
arrugando como los dedos inmersos mucho tiempo en el agua
se nos esta arrugando el amor antes de tiempo
y el mio solo suelta llamas queriendo encandilarte
La soledad es mi eterna compañera y enemiga, 
he tratado de convivir con ella de todas las formas posibles
y siempre termina venciendo y confirmando su estadía 
Pero esta vez se trata de tu ausencia que está helando mis espacios,
el vacío tan profundo después de reír y reír con obligada locura 
reír hasta que duela el rostro de tanto esfuerzo,
reír para luego estupefacta darme cuenta de que el vacío permanece intacto,
que por más movimientos que hice en estos años 
o que por más mejoras que he tratado de construir en esta torre 
nada ha ayudado lo suficiente,
por que quizás cometo más errores que antes o tal vez
estos ya me son imperdonables, 
Por que esta vez se trata de ti, de ti, 
que como holograma vas y vienes en esa imagen que se desvanece 
tú que me ocupas por completo y sin embargo no puedo tocarte ni un solo dedo
se trata de ti y de tu fuente que como agua cálida viertes en mi
y yo sin lograr bailar a tu ritmo...
Que el escaso tiempo, que las responsabilidades, que la debilidad de mi genio
que mi carácter, que mis marcas de tiempos pasados
que la poca fe, que mis fantasmas, que yo tratando de vencerme al mismo tiempo
y tu perplejo observando, acompañando y ahora casi yéndote...
que tenemos miedo, que se me hace insoportable esta realidad
que me cuesta saberte tan lejos, que te tengo y no
que tal vez solo serás el recuerdo del mejor hombre que he conocido 
y no pude más que mirar en videos y quererlo quizás sin merecerlo
la tristeza tan grande de ver como se va cerrando mi temporada en la felicidad
Que triste que se viene este día
tan triste como hace tiempo no sentía
triste como si de un inicio a un nuevo y profundo vacío se tratase
triste de mi y tu lejanía
triste de mi lejanía y triste de ti






Ya no fue, no es, ni será...



El momento había sucedido,
ya no era ahora y tampoco volvería…
La oportunidad había sido precisamente hace un segundo antes,
hace dos pestañeadas previas e incluso mucho antes de ese bostezo... 
El momento ya había sucedido
y todo empezaba a dar cuenta que ese instante no se sostenía,
que a medida que avanzaban los respiros, 
los segundos se hacían más escurridizos 
y mientras más pensaban en buscar un nuevo y mejor momento,
sólo conseguían ir perdiendo el tiempo tras el siguiente tiempo...
Lo único certero que tenían era la perdida de la ocasión perfecta, 
ni aun fabricando un mundo nuevo, ésta volvería...
La oportunidad se había diluido antes de los enojos 
y mucho antes de las miradas llenas de sarcasmo...
Se les estaba yendo el instante, los segundos, el trance 
y hasta la época daba pasos de gigante,
las miradas se iban cerrando mientras se perdían 
y enredaban en el tiempo; 
esa ausencia del retorno que es este viaje…




Otra para ti, de los días que más te pienso

En el cielo, en el agua, en el aire. No estás físicamente, pero te volviste un suspiro, una risa, un día soleado una cuerda de la guitarra y...

Entradas mas vistas