Poema 7 de un 2015

Una piedra al agua y las ondas tocan tus rodillas...
tu piel sumergida en mi lago dulce, 
en mi humor acuoso 
en mi amor oculto
sumergido como en la memoria sufriente 
del que toma medicamentos para el alzheimer
y estas manos incansables continúan lanzando piedras
para quizás por un instante 
ver tu reflejo ondulante...
Hasta aquí realmente no me llegan tus partes
y es mi cuerpo y mi mente donde permanece tu imagen
más, ni tu cuerpo ni tu mente 
se encuentran de este lado para suavizar el aire
Dulce asombro sería que, 
en un destello onírico lograra rozarte...






No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Canela

Al vestirnos de horizonte, la alta canela de la primera capa, que llamamos piel, se eriza y enrosca conmigo. La cantata pueblerina se entona...

Entradas mas vistas